Blogia
Zona Peatonal

¿No querías caldo?.

Como soy una ignorante y una atrevida, hace unos meses me atreví a enunciar lo fácilmente arreglable que era la situación que reflejaba la foto de aquel post.

 

Valla en la acera del Llano de Palacio

 


...y su peculiar anclaje?

 

La valla se sujeta al suleo con un alambre

 

Pues yo, temeraria y osada, aventuré que no era para tanto, que una radial y un poco de cemento ya valdrían para quitar de enmedio semejante estorbo herrumbroso. Pero hete aquí que nada más lejos de la realidad. De una radial y un poco de cemento nada de nada. Hacía falta: un contenedor, dos garrafas de 50 litros de agua, una taladradora, cuatro vallas metálicas, un currante, dos mirones, dos mironas, una carretilla,... Puff!. Si sólo en hardware ya hay una pasta ahí, del coste en recursos humanos, ¡¡¡ni hablamos!!!.

 

Personal de un plan de empleo arreglando el anclaje donde estaba la valla

Pero lo mejor, lo mejor, lo mejor de todo es lo que no entonces aún no quedaba claro, pero que prometo colgar mañana. Todo el obrón y la parafafernalia ha sido necesaria para adecentar el anclaje, porque se va a volver a usar el lugar para colocar algún aparatejo que necesita corriente eléctrica para funcionar. Pero, ¿adivináis dónde ha quedado el anclaje?. Pues sí, ¡¡¡¡en to'l medio la acera!!!.

Sea lo que sea lo que ahí vaya, no hay duda: detrás del asunto está el mismo diseñador aventajado y sublime del armario de la Avenida. ¿No habrá pensado este tipejo en firmar sus obras?. Así podríamos agradecer los ciudadanos personalmente su aportación a los tropezones particulares. ¡Qué cruz, señor, qué cruz!.

1 comentario

Loquito -

Pamina, simplemente ¡¡¡ cojonudo !!!